A partir del próximo 16 de julio, los trabajadores de diversos sectores experimentarán un cambio significativo en su vida laboral, gracias a la implementación de una nueva ley que busca mejorar la calidad de vida y el rendimiento en el trabajo , esta legislación establece una reducción gradual de la jornada laboral a lo largo de varios años, con el objetivo final de alcanzar las 42 horas semanales en 2026.
En este año 2023, la jornada laboral se verá reducida a 47 horas semanales, marcando el inicio de un proceso de ajuste gradual, la nueva ley aborda aspectos clave para asegurar el cumplimiento de esta reducción, en primer lugar, se prohíbe la disminución del salario de los trabajadores, garantizando que su remuneración no se vea afectada por esta medida.
Además, se enfatiza la compensación adecuada de las horas extras trabajadas, estableciendo que las empresas que no cumplan con esta disposición estarán sujetas a sanciones. Asimismo, se insta a los empleados y empleadores a negociar la distribución de las horas entre los días de la semana, asegurando al menos un día de descanso semanal para cada trabajador.
La ley también prohíbe que los empleadores programen dos turnos en un mismo día, con la excepción de aquellos empleados que ocupen cargos de dirección, esta medida busca evitar la sobrecarga de trabajo y preservar el equilibrio entre la vida laboral y personal de los empleados.
En relación al trabajo de menores, se establece que aquellos de entre 15 y 17 años solo podrán laborar en jornada diurna, con un máximo de 6 horas diarias y 30 horas semanales, hasta las 6:00 de la tarde. Por otro lado, los empleados mayores de 17 años podrán trabajar hasta 8 horas diarias y 40 horas semanales, hasta las 8:00 de la noche.
A partir del próximo lunes, los empleados trabajarán 47 horas a la semana, lo cual representa una disminución de una hora con respecto a la jornada actual de 48 horas, en los años siguientes, la jornada continuará reduciéndose, siendo de 46 horas en 2024 y así sucesivamente hasta llegar a las 42 horas en 2026.
Si bien esta medida ha sido recibida con entusiasmo por parte de los trabajadores, el sector empresarial ha manifestado ciertas preocupaciones, Gremios como Fenalco y la Andi han expresado su inquietud sobre el impacto que esta reducción de la jornada laboral podría tener en sectores como el comercio, los restaurantes, los hospitales y los call centers, para estos gremios se anticipa que las empresas enfrentarán costos adicionales al tener que pagar recargos por trabajo suplementario una vez superada la nueva jornada máxima.
Con la entrada en vigor de la ley 2101 de 2012, se espera que tanto los empleados como los empleadores se adapten a los cambios y encuentren un equilibrio que beneficie a ambas partes, el objetivo es lograr una mejor calidad de vida laboral para todos, fomentando un ambiente laboral saludable y productivo.
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